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Entrevista con Arien van Vliet de Brazil

Arien van Viet, de Van Vliet Antúrios, procede de una familia de origen neerlandés. Nació en Brasil, vive actualmente en Holambra SP Brasil y trabaja como ingeniero agrónomo. Reside en la granja de su familia, siendo la tercera generación de la empresa familiar Van Vliet. Arien se identifica mucho con la agricultura por el lugar donde vive y por lo que hace. Desde muy pequeño ya acompañaba a su padre a trabajar. Tras licenciarse en la universidad, empezó a trabajar a tiempo completo en la empresa en 2005.

¿Qué es Van Vliet Anturios y cuál es su función?
Van Vliet es productor de anturios, tanto en maceta como de plantones, y colabora con Anthura desde 1994. Soy el propietario y director de la empresa desde 2018, que es cuando mi padre se jubiló. Ahora mismo soy el único de mi familia en la empresa, ya que mis hermanos no estaban interesados porque tenían otros intereses y titulaciones académicas.

Arien van Vliet

¿Cuál es la historia de la empresa?
Mi abuelo compró la propiedad en 1965 y empezó el negocio con la producción de huevos. Poco después, en 1972, comenzó a producir gladiolos. Mi padre, siendo el hijo mayor de ocho hermanos, se puso a trabajar con mi abuelo a los 13 años y en 1980 puso en marcha la producción de flores cortadas – gerberas -, convirtiéndose en el primer productor de Brasil.

En 1994, empezó a producir anturios para flor cortada y también se asoció con Anthura, a lo que siguió la producción de anturios en maceta en 2000. En 2005 efectuamos alguna modificación en los invernaderos, como la incorporación de un sistema de ventilación pad-fan, de calefacción y de sombreado, con el fin de mejorar la calidad y el nivel de los anturios en maceta. Unos años más tarde decidimos dejar de producir anturios para flor cortada y nos centramos únicamente en los anturios en maceta.

¿Puede explicarnos de forma resumida la estructura actual de su empresa y sus avances en los últimos años?
Van Vliet dispone de una superficie de 23 hectáreas; con 23 000 metros cuadrados de invernaderos dotados de sistema de ventilación pad-fan, sombreado, calefacción, drenaje y depósitos para la recogida de aguas pluviales. Las inversiones más recientes que hemos implantado en los últimos años han sido la adquisición de una caldera (para calefacción), energía fotovoltaica y la ampliación de los invernaderos con una nueva edificación con vestuarios y baños para los empleados.

Hace poco han construido un nuevo invernadero. ¿Puede contarnos algo más sobre esto?
En 2023, añadimos 2 150 metros cuadrados de invernadero, ya que la producción de anturios iba en aumento. El invernadero de anturios supuso una gran inversión (en comparación con otros cultivos) y tras la pandemia este coste se hizo aún mayor. Hicimos la inversión con recursos propios porque el tipo de interés bancario en Brasil es muy alto —del orden del 13-15 % anual.

¿Por qué han elegido los anturios en maceta?
Los anturios en maceta arrojan un mayor beneficio y, por este motivo, los ingresos por metro cuadrado y año son excelentes. Asimismo, el cultivo de anturios es relativamente sencillo y, sobre todo, es algo que me encanta. El anturio es una planta muy apreciada en Brasil, y el consumo de flores y, en consecuencia, de anturios, ha aumentado con los años.

Anurio planta joven

¿Cómo organizan las ventas y la distribución?
Nuestras ventas las gestiona la cooperativa Veiling Holambra, que es el mismo sistema que emplea Veiling en los Países Bajos. Toda la producción se entrega a la cooperativa, donde nuestros clientes compran y suministran a todas las regiones de Brasil. Actualmente trabajamos con un 80 % de ventas directas y un 20 % a través de la subasta holandesa.

Vemos que en Brasil la subasta holandesa sigue teniendo un peso muy importante, en comparación con los Países Bajos (según informes de productores neerlandeses).

¿Qué distingue a su empresa de las demás, tanto dentro como fuera de Brasil?
Somos una empresa familiar pequeña; no dejamos de implantar mejoras y de reforzar la profesionalidad, incorporando asesores para automatizar, innovar y crecer de forma sana y sostenible.

En todo momento trabajamos para introducir mejoras en los invernaderos con el objetivo de automatizar procesos y formar a nuestros empleados.

En Europa, la energía sostenible constituye un tema candente. ¿Qué importancia encierra para ustedes?
La palabra sostenibilidad es de suma importancia y Van Vliet lleva trabajando duro en este tema desde 2007, cuando recuperamos cuatro hectáreas de bosque cerca del río que atraviesa nuestra propiedad.

En 2010 creamos un depósito de 6 000 metros cúbicos que capta las aguas pluviales que luego utilizamos para el riego. Todos los invernaderos cuentan con sistemas de drenaje y toda el agua utilizada para la irrigación vuelve al depósito. El año pasado invertimos en la compra de 432 paneles fotovoltaicos para generar energía, abasteciendo toda nuestra demanda energética y aprovechando toda la intensidad luminosa que ofrece Brasil.

En cuanto a la producción, no dejamos de reducir el uso de pesticidas químicos para emplear más pesticidas biológicos. Por otro lado, en estos momentos realizamos pruebas con fertilizantes biológicos para poder disminuir el uso de fertilizantes minerales.

Depósito

¿Cómo ve el futuro de su empresa y cuáles son los mayores retos a los que se enfrenta?
Van Vliet podría crecer en tamaño y, en consecuencia, en producción, pero en los últimos años hemos tenido dificultades con la mano de obra. Holambra está cerca de grandes ciudades como Campinas, una zona industrializada que ofrece muchos puestos de trabajo. En consecuencia, la gente no quiere trabajar en empresas rurales porque cuenta con otras posibilidades en la zona.

En Brasil, la mano de obra juvenil está cayendo en picado porque las parejas tienen menos hijos, y es posible que dentro de diez años el crecimiento demográfico en Brasil sea negativo. Por lo tanto, tendremos que invertir en tecnología (cintas transportadoras sin fin, robots, etc.) para suplir esta falta de mano de obra. Otra opción sería pensar el modo de suscitar en los jóvenes el deseo de trabajar con flores y plantas. ¿Qué podemos hacer para resultar atractivos? ¿Qué podemos hacer diferente de lo que hacemos hoy? Sin duda tenemos trabajo por delante en esta cuestión.

¿Qué podrían aprender otras empresas de ustedes y viceversa?
Dado que producimos en Brasil, que goza de un clima cálido y húmedo sobre todo en verano, muchas de las circunstancias que se dan en los Países Bajos no se dan en Brasil. Por ejemplo, recibimos mucho sol y, por tanto, no podemos importar las recomendaciones de cultivo de los Países Bajos. Nuestro clima no llega a fríos extremos, por lo que necesitamos variedades más resistentes al calor que al frío.

En cuanto a aprender de otros países, considero que la tecnología y una inversión importante en tecnificación son parámetros importantes.

Invernadero de Arien van Vliet

¿Qué papel desempeña Anthura en esto?
Durante mi última visita a Anthura, pude observar el trabajo que se viene realizando en la mejora genética constante de anturios y orquídeas. Este trabajo permitirá renovar y actualizar continuamente las variedades, adaptándolas a las realidades climáticas de cada país o región.

En cuanto a la producción, entiendo que, dada la escasez de mano de obra y el elevado coste de los insumos, Anthura podría ponernos al día en materia de tendencias tecnológicas, costes de producción y definiciones de normas, con el fin de optimizar el espacio y los costes de producción.

¿Cómo viven la colaboración con Anthura?
Llevamos casi 30 años trabajando con Anthura y la considero una empresa de gran profesionalidad y muy seria. Tras este tiempo puedo dar fe de que se trata de una empresa familiar sólida y que desempeña un papel decisivo en el mercado de la obtención de plantas en los Países Bajos.

Recuerdo las variedades con las que trabajábamos en el pasado, hace muchos años: eran variedades que aún no resistían el frío, y he podido presenciar cómo han ido mejorando hasta nuestros días. Por otro lado, debo mencionar que en 2016 sufrimos un problema en nuestra producción, por lo que pasamos un año difícil en cuanto a ingresos. Anthura nos dio un gran respaldo para superar ese reto, lo que demostró su fe en Van Vliet y nuestra larga colaboración.

Invernadero (exterior) Arien van Vliet

¿Cuáles son sus mayores retos para el futuro?
El gran reto es la actual falta de mano de obra disponible debido al desinterés de los nuevos profesionales por el trabajo operativo. La elevada rotación de personal genera un descenso de la productividad, así como la pérdida de calidad en la gestión debido a la falta de experiencia. De cara al futuro, Van Vliet es consciente de que será necesario trabajar para retener el talento y para incrementar la automatización o mecanización de los procesos, buscando una mano de obra más cualificada que permita optimizar la producción manteniendo nuestros estándares de calidad.

Como líderes en la producción de flores y plantas en Brasil abordamos las tendencias del mercado, por lo que debemos tener en consideración a la nueva generación de consumidores. Debemos intensificar la profesionalización en nuestros sectores para garantizar una gestión descentralizada que permita en el futuro una sucesión sin problemas o que atraiga a otros inversores.